Mientras que desde el interior de la casa no percibieron inicialmente la gravedad de lo sucedido, la gente desde el exterior vio los daños que habían sufrido con el bombardeo y acudió a ver si las hermanas estaban vivas, si estaban bien y si necesitaban algo.
Las hermanas agradecen tanto al Instituto por la cercanía, la oración y por la posibilidad de permanecer en ese lugar en esta dramática situación, porque ellas son la única esperanza de la gente que repite: “Mientras estén ustedes, nosotros tenemos esperanza, ¡no nos abandonen también ustedes!”.
Durante la llamada telefónica, se escuchaba llorar a los niños y niñas, que hoy eran unos cincuenta, junto con las madres y mucha gente pobre. Las hermanas acogen a todos, hasta el punto de no saber cuántas personas tienen en casa.
Las fotografías que ilustran esta noticia, nos permiten ponerle cara a las Salesianas de Jartum, así como al sacerdote y el profesor que resultaron heridos. Son unas fotos que ilustran el día a día de la misión de las Salesianas antes de que la bomba interfiriera en su labor.
Os dejamos enlace a la noticia publicada en la web del Instituto Hijas de María Auxiliadora:
- TRANSFERENCIA: ES76 0182 3191 8502 0166 9499
- BIZUM: 01015 (utiliza este código para colaborar en la reparación de la casa refugio de las Salesianas en Jartum)
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